Miles de aimaras anunciaron «guerra civil» en caso de que el Gobierno siga enviando militares a sus pueblos en Puno. Este lunes 20 de febrero, ciudadanos de diferentes provincias del sur de la región del altiplano reanudaron sus movilizaciones para exigir la renuncia de Dina Boluarte.
Alrededor de 20.000 aimaras han ingresado a la capital de la región vestidos de manera uniforme: los hombres con terno y las mujeres en polleras y mantas del mismo color. Esto es una señal de organización y una demostración de las decisiones colectivas para continuar con las protestas antigubernamentales.
La población aimara advirtió de su respuesta ante posible envío de militares a diferentes zonas de Puno. Aclararon que no dejarán que ingresen a tomar control de sus pueblos y que la única salida en ese caso sería una «guerra civil».
Por otro lado, informaron sobre la campaña “Volveremos y seremos millones”, a través de la cual buscan regresar a la ciudad de Lima en conjunto para protestar, ya no solo por delegaciones. Con esa modalidad viajaban grupos y juntaban dinero, pero ahora lo harían con coordinaciones entre toda la población. Los manifestantes sostuvieron que las muertes no pueden quedar impunes.
Los ciudadanos de la zona sur de Puno reafirmaron la huelga indefinida y expresaron su rechazo en contra de Dina Boluarte. Acompañados por bandas de músicos y con pancartas, banderas y demás artículos habituales en protestas, ingresaron desfilando a la plaza de Armas de la localidad. Además, con cánticos como “aimaras unidos jamás serán vencidos», «si no hay solución, segundo aimarazo» y «cuántos muertos quieres para que renuncies; Dina asesina, el pueblo te repudia», realizan sus marchas por las calles principales.
Estudiantes de la Universidad Nacional del Altiplano también protestan este lunes.
Fuente La República