El Juzgado Penal Colegiado, conformado por los magistrados Pepe Alvarado Gonzálvez, Julver Gonzáles Cáceres y Javier Salazar Flores, este lunes 20 de marzo dictó cadena perpetua para el policía dado de baja Santiago Paco Mamani (26) por secuestro y subsecuente asesinato, en agravio de Judith Machaca Cauna (20) y Noemí E.L.(14). Tres de los familiares del feminicida, presos al igual que él, también recibieron la misma pena.
Noemí y Judith desaparecieron en octubre y noviembre del 2020, respectivamente. Sus cuerpos fueron hallados el 9 de febrero del 2021 en una chacra de la familia del policía, en un pozo, a 80 metros bajo tierra. En el juicio, él dijo haberlas matado en distintas fechas.
El Juzgado calificó a la esposa de Paco, Diana Esmeralda Apaza Sayritupa (25), como coautora del crimen de Judith y a los padres de él, Jorge Aniceto Paco Cabrera (57) y Nancy Marisol Mamani Huayhua (50), como cómplices. Además, se impuso el pago de una reparación civil de 300.000 soles para Paco y sus padres. El dinero deberá ser abonado a los deudos de la adolescente Noemí.
Los cuatro sentenciados deberán abonar otra reparación civil de 200.000 a los padres de Judith. Los jueces llegaron al fallo descrito por unanimidad y este lunes dieron un adelanto de la sentencia. El 30 leerán la resolución completa y se darán todos los argumentos; sin embargo, resaltaron que el feminicida era un agente policial y que su deber era proteger a la población.
Los magistrados señalaron que existen pruebas en el caso que generaron duda razonable y recordaron que fue el propio Paco quien reconoció ser autor de los crímenes. La audiencia se dio de forma virtual y los padres de las víctimas realizaron un plantón a las afueras de la Corte Superior de Justicia.
El papá y la mamá de Judith, Susana Cauna y Gabino Machaca; y el padre de Noemí, Jonathan Escobar, pidieron que se siga investigando a más policías, ya que dudan que el sentenciado sea el único involucrado en los crímenes. Recordaron que Paco declaró, cuando estaba prófugo, que existía una red de trata operada por un grupo de policías y que fue esa la que captó a Noemí.
Fuente: La República